10 Ene Cuarto trimestre 2022
Durante el periodo comprendido entre octubre y diciembre del año 2022, un total de 38 peatones fueron atropellados en el Área Metropolitana de Guadalajara. De ellos, 29 personas fallecieron en el mismo instante del siniestro vial, es decir, 3 de cada 4 peatones atropellados. El resto de peatones que sufrieron de alguna lesión, que en este periodo fueron 9, no sabemos lo que haya sucedido con ellos una vez que fueron trasladados a recibir atención médica.
Desde que el Colectivo Pasos Blancos comenzó a registrar cada hecho vial en donde un peatón se ve involucrado en la ciudad de Guadalajara (julio de 2020), este trimestre se posicionó como el tercer periodo de mayor fatalidad, sólo por detrás del periodo julio-septiembre del año 2022, que registró un total de 32 personas fallecidas en el mismo lugar del incidente, y del periodo octubre-diciembre del año 2021, en donde 30 personas perdieron la vida. Este trimestre, con 29 fallecidos, sigue marcando una línea preocupante en este tema, ya que se continúan presentando estos hechos de manera constante y con una tendencia sostenida y a la alza.
En esta ocasión, 4 vialidades concentraron cuando menos 2 siniestros con peatones fallecidos. Se tratan de vías que se hacen presentes en cada reporte trimestral, lo que nos habla de su peligrosidad para caminar y hacer uso de ellas. Carretera a Chapala fue la de mayor incidencia, con un total de 3 peatones fallecidos en esta vía. Le siguen la autopista a Zapotlanejo, la av. López Mateos y el Periférico, con 2 peatones fallecidos en cada una de ellas.
Lo hemos reiterado en cada reporte trimestral que publicamos: vías de flujo continuo, con condiciones en su infraestructura y diseño geométrico que propician altas velocidades vehiculares, son un peligro y una amenaza para un modelo de ciudad más humano y enfocado en las personas. Las 4 vías mencionadas en el párrafo anterior justamente tienen estas condiciones, vías sin semáforos, demasiados carriles destinados a la circulación de los vehículos, y muy poco espacio y de mala calidad para los peatones, quienes al no poder circular de manera segura por la banqueta, muchas veces tienen que compartir el arroyo vehicular, con el evidente riesgo que esto representa.
Proyectos como Mi Macro Periférico, vialidad en donde se han seguido presentando siniestros viales con fallecidos desde la puesta en operación del sistema BRT, o la absurda idea de un segundo piso sobre la av. López Mateos, son muestra fidedigna de que, a pesar del discurso de una movilidad sustentable y segura para todos los usuarios de la vía, sigue prevaleciendo esa necesidad de diseñar y construir proyectos para el desplazamiento de vehículos y no de las personas que hacen uso de los modos activos de movilidad.